La torticulis congénita se trata de una contracción muscular en el cuello de un bebé al nacer. Esta pueda mantener la cabeza fija o rotada hacia un lado.
Síntomas
Los bebés con tortículis congénita presentan los siguientes características:
Inclinación de la cabeza del bebé hacia un lado
dificultad para mover la cabeza
rotación de la barbilla del bebé
sensación del "bulto" al tocar el cuello
Causas La tortículis congénita se puede observar en el nacimiento. Las causas son:
Parto traumático, por un sobreestiramiento del músculo.
Mal posición fetal.
Uso de Fórceps.
Nacimiento en posición podálica.
Parto de nalgas.
Plagiocefalia.
Consecuencias
La principal consecuencia de la tortícolis congénita es la tendencia del bebé a mirar siempre hacia el mismo lado, al tener una limitación para girar el cuello hacia el lado lesionado. Esto puede dificultar la lactancia materna además de provocarle un aplanamiento del lado de la cabeza donde el bebé se apoya con más frecuencia
Tratamiento
Los tratamientos dependerán de los síntomas y la gravedad de la tortículis. Usualmente se le aplican estiramientos, ejercicios y estoimulación infantil. Adicional a esto, se le pueden aplicar equipos de alta tecnología que ayudan al músculo relajar.
La importancia de la fisioterapia tiene que ver con la menera que la tortículis congénita puede afectar el desarrollo del infante. Siento la cabeza, lo primero que aprenden los bebés a mover, necesitan poder hacerlo libremente para poder desarrollarse con la libertad necesaria durante los cruciales primeros 1000 días de su vida.
Plan controlado de estiramientos
Laserterapia de acupuntura
Estimulación infantíl
